Plasencia, 9 de junio de 2021. Marcar la casilla de Fines Sociales o X Solidaria en la renta implica que muchas personas en situación de especial necesidad y vulnerabilidad puedan beneficiarse de los programas financiados a las ONG. Gracias a este sencillo gesto de marcar la X Solidaria, cada año, se impulsan distintos proyectos sociales para lograr una sociedad más justa, inclusiva e igualitaria que no deje a nadie atrás, contribuyendo a que la sociedad avance gracias al trabajo de las ONG. En un año además en el que nuestra sociedad se ha visto golpeada con especial dureza por la crisis sanitaria, social y económica que venimos padeciendo, más que nunca, hemos de animar a los 208.000 contribuyentes extremeños que todavía no marcan la X Solidaria, a que lo hagan en su declaración de la renta de 2020.
En la presentación de la Campaña X Solidaria 2021 que ha tenido lugar en el Centro Integral de Empleo de Cáritas Diocesana de Plasencia, en la recta final de la Campaña de la Renta 2020, se ha hecho un nuevo llamamiento a los 208.000 contribuyentes extremeños que todavía no marcan la X Solidaria para que lo hagan en su declaración de la renta de 2020.
En el acto de presentación de la Campaña, en el que han intervenido el Vicepresidente de Políticas Sociales y Territoriales de la Plataforma del Tercer Sector de Extremadura y Presidente de Cruz Roja Española en Extremadura, Jesús Palo Tiburcio, y el Miembro del Consejo Asesor de la Plataforma del Tercer Sector de Extremadura y Director del Área de Acción Social de Cáritas Diocesana de Plasencia, Iván Torres Sanz, se ha puesto nuevamente en valor la unidad de las ONG en torno a la Plataforma del Tercer Sector de Extremadura, para incidir en la importancia de que las personas contribuyentes marquen la casilla 106 ó “X Solidaria” en su declaración de la renta además de la 105 de la Iglesia, en el marco de una Campaña de la “X Solidaria” que este año se presenta en un contexto de crisis sanitaria, social y económica provocada por la COVID-19, que ha afectado con gran dureza a las personas en situación de mayor vulnerabilidad: personas en situación de pobreza y exclusión social, personas mayores, con discapacidad, infancia.
En su intervención, Jesús Palo ha destacado la importancia de esta Campaña de la X Solidaria, algo “tan necesario para mantener lo que hacemos en Extremadura desde las distintas ONG”, y que “implica que muchas personas puedan llegar a los recursos que prestamos”. Pues según indicó “en 2020, gracias a la asignación de la X Solidaria de la Campaña de la renta de 2019, hubo 40.045 personas beneficiarias de los proyectos y programas financiados con cargo a la asignación tributaria del 0,7. Y en 2021 serán más las personas beneficiarias, pues en 2020 las personas que marcaron la “X Solidaria” han aumentado. Se han sumado a ella más de 360 mil personas a nivel nacional, lo que hace que seamos más de 11 millones y medio de personas, haciendo posible la labor de las ONG en un contexto socio sanitario convulso debido a la pandemia de la COVID-19. El 55% de las personas contribuyentes marcaron la casilla solidaria de la renta, superando los 11 millones y medio de personas. Aunque, sin embargo, todavía hay un 45% de personas que no lo hace, o bien porque marcan solamente la casilla de la Iglesia Católica (11%) o porque no marcan ninguna casilla, dejando en blanco su asignación (34%)”.
Para concluir, Jesús Palo ha hecho un llamamiento especial a que se marquen las casillas 105 y 106 en la declaración de la renta, porque ayuda a muchas personas con nombres y apellidos, expresando su deseo de que “ojalá llegue un día en que no sea necesario marcar esa casilla”.
A continuación, Iván Torres ha facilitado los datos de contribuyentes extremeños y de la asignación tributaria en la Declaración Renta 2019. Según indicó, 279.054 personas (El 57,28% de los declarantes) marcaron la casilla de fines de interés social con una asignación tributaria total de 5.312.715 euros (El 63,80% del total). Y además ha señalado que estas cantidades podrían haber aumentado en 208.104 declarantes con una asignación potencial de 3.013.978 euros. Por lo que ha animado a la participación de estos declarantes para que esos más de tres millones de euros puedan llegar a las personas que más lo necesitan.
Para Iván Torres, marcar esa casilla de la X Solidaria y la de la Iglesia “ayuda a millones de personas que de verdad lo necesitan”, a través de los programas financiados gracias a ese simple gesto y que están dirigidos principalmente a la infancia, las familias, juventud, mayores, personas con discapacidad, y personas en situación de pobreza y vulnerabilidad. Según indicó “El Tercer Sector es una garantía de acción y es más necesario que nunca, tal y como hemos visto durante el confinamiento duro, pero necesita de financiación adecuada, a lo que se une que marcando la casilla de fines sociales sabemos que nuestro dinero será invertido en una buena causa”.
En la comparecencia ante los medios de comunicación, también han participado María del Carmen Rodríguez Arroyo, beneficiaria de los programas que Cruz Roja Española en Extremadura viene prestando en Jaraíz de la Vera; y Edward Kingtimbuktu, beneficiario de los programas de Cáritas Diocesana de Plasencia. Para dar sus testimonios de cómo ellos, al igual que otros muchos miles de personas en nuestra Región, se benefician de los proyectos financiados por el 0’7% del IRPF.
En su testimonio, María del Carmen Arroyo ha destacado cómo gracias a los programas de Cruz Roja, actualmente cuenta con los cuidados de una voluntaria que es “su ángel de la guarda”, que la visita todas las semanas, la ayuda a hacer la compra, la acompaña a las consultas médicas tanto en Jaraíz como en Plasencia, le recoge la medicación, le toma la tensión, o la llama por teléfono para ver cómo está. Para concluir, añadió que “Cruz Roja me ha mejorado la vida. Me dan cariño, y una ayuda imprescindible en mi vida diaria”.
Por su parte, Edward Kingtimbuktu ha explicado su largo periplo desde Angola a Costa de Marfil, y Senegal, recabando en España en distintas ocasiones, hasta que le fue diagnosticado un linfoma y tras pedir asilo humanitario que le fue denegado, acabó llegando finalmente a Plasencia donde gracias a Cáritas logró finalmente regularizar su situación legal en España. Después de más de treinta años fuera de su país natal, que no le reconoció su nacionalidad, y pasar una larga enfermedad, concluyó que “después de todo lo que he vivido, lo importante es que estoy vivo”, agradeciendo por último a Cáritas Diocesana de Plasencia, donde actualmente trabaja, toda la ayuda que le ha prestado.
